Delegar es clave para gerentes nuevos, aligera la carga y empodera al equipo. Es fundamental enfocarse en gestionar personas y procesos en lugar de hacer el trabajo uno mismo. Artículo publicado en hbr.org y recomendado por Digital Skills Institute el 21 de febrero de 2025.
Delegar es una habilidad esencial que todo nuevo gerente debe aprender desde el principio de su carrera en roles de liderazgo. El proceso de delegar no solo es una herramienta estratégica para gestionar tareas y cargas de trabajo, sino que también es vital para fomentar el crecimiento y el desarrollo del equipo a cargo. Inesperadamente, cuando una persona es ascendida a un puesto de dirección, su día a día deja de girar en torno a hacer el trabajo por sí misma; lo fundamental es supervisar y guiar a su equipo. Esto requiere un cambio de mentalidad de ejecutar tareas a gestionar personas y procesos, lo que inicialmente puede parecer incómodo para muchos.
La transición hacia un rol de liderazgo implica ofrecer a los demás la oportunidad de asumir responsabilidades, lo cual no solo alivia la carga de trabajo del gerente sino que también empodera a su equipo, permitiéndoles adquirir nuevas habilidades y aumentar su confianza. Un estudio de caso ilustrativo es el de Tom, un gerente novel, quien comenzó una sesión de coaching con una lista de tareas de tres páginas. A pesar de estar emocionado por sus nuevas responsabilidades, se sentía abrumado por la cantidad de tareas que había asumido. Este es un ejemplo típico de cómo, a nivel inicial, muchos managers tienden a retener tareas en vez de delegarlas, lo cual puede llevarlos a la saturación y a la ineficacia.
La resistencia al cambio de "hacer a gestionar" puede tener consecuencias negativas no solo en el rendimiento del líder, sino también en el potencial de desarrollo del equipo. La delegación eficaz es mucho más que asignar tareas al azar; se trata de identificar las fortalezas y debilidades de los miembros del equipo y asignarles tareas que no solo complementen sus habilidades, sino que también las desafíen y expandan sus capacidades.
Existen cursos específicos que ayudan a los gerentes a desarrollar habilidades de delegación. Un ejemplo de estos programas es el ofrecido por HBR Learning, que proporciona formación online sobre liderazgo. Estos cursos permiten a los participantes obtener insignias certificadas que pueden exhibir en plataformas profesionales como LinkedIn, potenciando sus perfiles laborales. Estas herramientas se han vuelto indispensables en un entorno laboral donde las habilidades de los líderes son constantemente evaluadas y donde se espera que estos se adapten y crezcan junto con sus equipos.
Un líder efectivo no solo es aquel que maneja bien su propio tiempo, sino quien transforma la dinámica del equipo al fomentar un ambiente de confianza y responsabilidad compartida. Al delegar, los líderes no solo optimizan sus tareas diarias sino que también cultivan relaciones de trabajo más fuertes y estimulantes. Esto es crucial para el éxito organizacional a largo plazo y para mantener la motivación y el compromiso de los empleados. Además, la delegación bien ejecutada es un reflejo de la confianza del líder en su equipo, lo cual es esencial para construir un ambiente de trabajo positivo y productivo.
Por lo tanto, para los gerentes que recién comienzan, es esencial abordar la delegación no solo como una solución a corto plazo para manejar cargas de trabajo, sino como una estrategia de desarrollo continuo que beneficiará tanto a ellos como a sus equipos en el futuro. La habilidad de delegar de manera efectiva marca la diferencia entre un gerente ordinario y un verdadero líder capaz de transformar su entorno laboral.